Según testigos, las dos mujeres que se encontraban en el interior del vehículo abandonaron el sitio en un bus urbano, dejando a los otros dos ocupantes. El herido fue trasladado a una casa asistencial por paramédicos del Cuerpo de Bomberos de Ibarra.
Al sitio acudieron también agentes de tránsito y personal de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased). Al principio se manejaron varias hipótesis con respecto al fallecimiento de uno de los ocupantes. La primera que murió asfixiado, la segunda por causa de una sobredosis o un paro cardíaco. En el interior de la camioneta se encontraron botellas de licor.
Sin embargo, minutos después, según los resultados médicos legales la causa oficial de su muerte se debió al denominado síndrome de latigazo, producto del accidente.
El denominado Síndrome de Latigazo Cervical (SLC) es una lesión de la columna cervical que acontece generalmente tras la colisión de vehículos a motor, al producirse una forzada extensión o flexión del cuello y una violenta oscilación de la cabeza de delante hacia atrás o de atrás hacia delante unido a movimientos de lateralidad y torsión forzada del cuello.